SAN SALVADOR DE HORTA nos enseña que Dios puede elegir a la persona más humilde para manifestarse a través de ella.
SAN LUCAS nos enseña que Jesús es para todos, independientemente de la raza, de la cultura, del sexo y de la clase social.
SANTA MARGARITA MARÍA DE ALACOQUE nos enseña a seguir con tenacidad la misión que Jesús nos ha encomendado.
SANTA TERESA DE ÁVILA nos enseña el valor de combinar la claridad de espíritu con la perseverancia.
SAN CALIXTO I nos enseña el valor de actuar con misericordia.
SAN GERALDO DE AURILLAC nos enseña que una vida de religiosidad es posible también para los laicos.
SAN EDWIN DE NORTHUMBRIA nos enseña el valor de combinar la prudencia con la acción.
SAN ALEJANDRO SAULI nos enseña el valor de tener claridad en nuestra vocación.
SAN CERBONIO DE POPULONIA nos enseña el valor de madrugar para tener una actitud positiva ante la vida.
SAN DIONISIO DE PARÍS nos recuerda los peligros que afrontaron los primeros obispos que instauraron el cristianismo.
SANTA MARÍA FRANCISCA DE LAS CINCO LLAGAS
DE JESÚS nos ofrece un ejemplo de vida dedicada a la penitencia y la oración.
SAN TRANQUILINO UBIARCO ROBLES nos enseña el valor de aceptar con tranquilidad los designios insondables de Dios.
SAN FRANCISCO DE ASÍS nos enseña el valor de renunciar a los bienes materiales.
SAN DIONISIO EL AREOPAGITA nos enseña el valor de escuchar con ánimo abierto a quienes predican ideas nuevas.
SAN LEODEGARIO DE AUTUN nos enseña los riesgos de predicar el bien en el seno de los poderosos.
SANTA TERESA DEL NIÑO JESÚS nos enseña el valor de la inocencia y la simplicidad.
Enseñanzas de Septiembre
SAN JERÓNIMO nos enseña el valor de dominar distintas lenguas.
SAN MIGUEL, SAN GABRIEL y SAN RAFAEL nos enseñan a amar y servir a Dios.
SAN WENCESLAO DE BOHEMIA nos enseña la importancia de anteponer el amor al ejercicio del poder.
SAN VICENTE DE PAÚL nos enseña el valor de la organización para realizar obras de ayuda al prójimo.
SANTA MARÍA TERESA COERCÍ nos enseña a sufrir con paciencia las contra dicciones y las humillaciones.
SAN NICOLÁS DE FLÜE nos enseña a combinar la vida cívica con la vida religiosa.
SAN PACÍFICO DE SANSEVERINO nos enseña a soportar con resignación las circunstancias más adversas.
SAN MATEO nos enseña una manera radical de seguir a Jesús.
SAN ALONSO DE OROZCO nos enseña el valor de servir a los demás a través de la palabra.
SAN JOSÉ DE CUPERTINO nos enseña la importancia de ser aceptados en una comunidad.
SANTA HILDEGARDA DE BINGEN nos enseña el valor de llevar al máximo los talentos con que Dios nos ha favorecido.
SAN ANDRÉS KIM TAE-GON nos ofrece un ejemplo de valentía para propagar la fe Cristiana por todo el planeta.
SANTA CATALINA DE GÉNOVA nos enseña la importancia de combinar la contemplación con la acción.
SAN JUAN CRISÓSTOMO nos enseña el valor de dominar
la fuerza de las palabras.
SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE nos enseña el valor de conservar la fe hasta las últimas consecuencias.
SAN NICOLÁS de TOLENTINO nos enseña el valor de la alegría y la importancia de sonreír.
SAN PEDRO CLAVER nos enseña la importancia de dignificar a la persona humana.
SANTO TOMÁS DE VILLANUEVA nos enseña el valor de la ayuda al prójimo por medio de una verdadera caridad.
SANTA REGINA nos ofrece un ejemplo de la veneración de los santos durante el Medievo.
SAN BERTINO nos enseña el valor de saber intercalar la administración de lo espiritual con la administración de lo terrenal.
SANTA IDA DE HERZFELD nos enseña la importancia de amar en los más pobres a nuestros semejantes.
SAN GREGORIO MAGNO nos enseña el valor de conservar la alegría cuando enfrentamos las situaciones más difíciles.
SAN NONOSO nos enseña el valor de irradiar calma y paz ante los embates de la ira.
SANTA VERENA DE ZURZACH nos enseña el valor de ofrendar la vida al servicio de los más necesitados.
